Bonjour bloggeras huerteras,

Como veo que nadie se anima a reabrir el diario de a bordo, me reestreno yo desde Grenoble.

A partir de ahora vosotras tendréis que ilustrar las novedades del nuevo huerto de Carpesa (sí, querido público: ¡¡nos mudamos!!), para satisfacer la sed de nuestra masa de fieles seguidoras :P y para que yo lo conozca un poco mejor, ahora que estoy lejos.

Yo, por mi parte, os mantendré al tanto de los progresos en nuestra nueva filial gabacha del projecte bleda: el precioso huerto de Monique.

Monique y Serpouhi, francesas de origen armenio, son mis antiguas vecinas de la rue de la Poste: por problemas de salud Monique ya no puede mantener sola su increíble jardin potager y ha aceptado mi ayuda con entusiasmo. Vamos a aprender muchísimo, porque Monique es una auténtica pro de los huertos y -ojo- de las conservas caseras. Imagino que las pautas de siembra y recogida no serán evidentemente iguales dada la diferencia de condiciones climáticas, pero seguro que podemos intercambiar cantidad de información e ideas. Considerémoslo nuestra pequeña misión de espionaje agrícola ;)

A cambio, creo que Monique espera de mí un poco de asesoramiento informático: se está poniendo al día con internet y el Photoshop y ya nadie está salvo de sus coloridos videomontajes a lo años 80 :D Por un tomate de verdad lo que haga falta, oigan.

Aquí un par de fotos antiguas del huerto en invierno (más o menos como ahora) y en primavera-verano. Menudo cambio, ¿eh? No encuentro pruebas gráficas del otoño pero también pasa, os lo juro. Las de la otra foto son Paz (ya la conocéis), Serpouhi, mi abuela postiza, y su hija Monique.

En fin, ya estamos todos!

Ah, no, falta el calor ;)